Libre como el viento
Firmé tu libertad con mi mordaza
y el beso que me diste lo demuestra.
Cumpliste con dulzura tu amenaza,
por algo siempre has sido mi maestra.
Tú forma tan esbelta de ir de caza
en todo lo que ya no es cosa nuestra
resulta un denso velo que disfraza
tu pose de inocencia tan siniestra.
Yo sé que nunca has hecho prisioneros,
con solo una función bailando en cueros
provocas un reguero de difuntos.
Me aliño una ensalada con mis quejas.
Jamás preguntaré por qué me dejas
si estábamos tan bien odiando juntos.

0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home