viernes, octubre 04, 2019

Mi madre y su novio alemán

Sentada con tu abanico y tus guantes
Desconfigurado tu termostato
En tu sopa de letras, garabatos
que trazas con el pulso vacilante.
A veces, aunque me tienes delante
te preguntas durante un largo rato
"¿quién narices será este mojigato
que a menudo me resulta irritante?
Que tiene tanto empeño en que me bañe
y en que la crema no se quede fría,
que insiste en que la escudilla rebañe
y en que no esté en mi cuarto todo el día
Que no es que vea mal que me acompañe
Seguro debe ser familia mía"