Pandemia de mi amor

El paréntesis furtivo
de nuestro prohibido amor
era la luz y el color
de mi corazón cautivo
de aquel ardor primitivo,
de cuando fui tu rehén…
En el jardín del edén
me comía tu manzana
cada gloriosa mañana
que tú me decías, ven.
cada gloriosa mañana
que tú me decías, ven.

¡Cómo cambió el panorama
con escuchar una tos!
Aisladísimos los dos
y todo el día en pijama.
Y nuestro juego de cama
escondido en el desván,
porque tu aburrido Adán
tenía teletrabajo
y yo mustio y cabizbajo
me quedé solo y sin plan
y yo mustio y cabizbajo
me quedé solo y sin plan

Triste pandemia, soñando,
contigo una peli porno,
y mientras tu cocinando
un pan de espelta en el horno.
Por culpa del virus chino
Ya no hay sexo clandestino
Por culpa del virus chino
Ya no hay sexo clandestino

Y pasaron las semanas
viendo en la tele a Simón,
y secando el lagrimón,
de añorar nuestras mañanas.
Y así se fueron mis ganas
Sin ardor y sin lujuria,
Sumergido en la penuria,
de ya no volver a verte,
e involucrado en un ERTE
tuve mis días de furia,
e involucrado en un ERTE
tuve mis días de furia

Salvada la pesadilla
y pasado el infortunio
una mañana de junio
te vi, tras tu mascarilla
Y sentí como una astilla
en mi corazón, insana,
y una tentación lejana
susurrada lentamente
en boca de una serpiente,
que mordiera tu manzana,
en boca de una serpiente,
que mordiera tu manzana.

Dulce pandemia soñando
contigo y con tu bizcocho
y ansioso estoy esperando,
verte mañana a las ocho.
Pandemia de mis amores
ya vendrán tiempos peores,
Pandemia de mis amores
ya vendrán tiempos peores..

Error 404

Cada fallo, cada error,
son lecciones aprendidas
y todas nuestras caídas
nos hacen hondo favor,
por mirar alrededor,
ponernos en pie con arte,
hacer un punto y aparte
y proseguir la carrera.
El suelo da la manera
de aprender a levantarte.

En el nombre del hijo

Cariño, ¿tú te imaginas
si tuviéramos un hijo?
¡Qué alegría y regocijo!
¿Tú por qué nombre te inclinas?
Me fui a comprar vitaminas
que llevo días muy lacia
y allí, de pie, en la farmacia
dudé entre Victoria o Víctor,
porque ayer me hice un Predíctor
y te va a hacer mucha gracia.

Sombras

Cincuenta sombras de Grey,
la sombra de una palmera
o que a la sombra me viera
yendo fuera de la ley.
La turbia sombra del rey,
una tenue sombra de ojo,
la sombra de un trampantojo,
o la sombra de una duda.
Da lo mismo si se suda,
sombra para mí sonrojo.

Sin rastro del alma

Me hicieron dos resonancias
con resultados normales
y varios TACs corporales
sin que me hallaran sustancia,
ni quiste o protuberancia,
que sugiera su presencia
o confirme su existencia.
Me examinaron con calma
pero sin rastro del alma
al menos según la ciencia

Anuncio

Príncipe de las Mareas
precisa bella durmiente
para acunarla a Poniente
alejados de Odiseas.
A orillas de chimeneas,
arenas olvidadizas,
ensoñaciones postizas,
dulces bostezos pequeños,
aunque hoy meceré sus sueños
mañana serán cenizas

Un lunar a la derecha

La cama medio deshecha
suaves caricias con jazz.
País de Nunca Hacia Atrás,
un lunar a la derecha.
Sin coordenadas ni fecha,
ni falta que nos hacía,
en la habitación sombría,
reposo de los guerreros,
entrelazados en cueros,
temblorosos todavía.

Serendipia

Lo nuestro no ha sido típico,
un flirteo en el Edén,
sino que ha sido, más bien,
un hallazgo serendípico.
No hay un noviazgo arquetípico,
con declaración y flores,
pero nos dimos amores
que ninguno se esperaba.
Cuando nadie se buscaba
fuimos benditos errores.

Timo de la primavera

Primavera, que tu sepas
que estoy muy decepcionado.
Mi sangre no se ha alterado,
no me importa si discrepas.
Equinoccios de otras cepas
hemos tenido a montones,
y he disfrutado estaciones
totalmente enardecido,
es por esto que te pido
la hoja de reclamaciones.

Una primavera presa
con la mascarilla puesta,
sin una mísera fiesta,
sin una ninfa traviesa.
Sin una simple promesa
volando en el viento escrita
sin deshojar margarita
que en sus pétalos defraude.
En fin, un sincero fraude
que espero no se repita.

El sentido de la vida (era hacia adelante)

Tengo la vida resuelta,
trabajar era el misterio,
nada más, lo digo en serio,
no había que dar más vueltas.
Siempre quedan tramas sueltas
dispersas por el camino,
como al girar del molino
no todo el río le mueve
ni todas las gotas llueven
al andar del peregrino.

Sin embargo, en ambos casos,
ves que firmes se mantienen
y que nunca se detienen
por lo que queda a sus pasos.
No viven de los fracasos
sino de cada ganancia.
Asumen la circunstancia
que no resulta propicia
y siguen sin avaricia
sin importar la distancia.

Mascarilla de belleza (Colombianas de Sarajevo)

Desde que uso mascarilla
las chicas me encuentran guapo.
ahora soy, en vez de sapo,
príncipe de pacotilla.
No hay besos en la mejilla
por mor del distanciamiento,
pero, sin duda, presiento,
que cuando pase la alarma,
me pondrá en mi sitio el karma
sin comerme ni un pimiento

Desde que uso mascarilla
las muchachas no me huyen,
más virtudes me atribuyen
y la mirada les brilla.
Es cubrirme esta perilla
con cuatro pelos de cabra,
y en un raro abracadabra
se rinden ante mi encanto
e incluso de tanto en tanto
me dirigen la palabra

Desde que uso mascarilla
me persiguen las chavalas
por las calles me señalan

y me acosan en pandilla
Me persiguen las chiquillas
y hasta alguna me importuna
les da igual si no hay vacuna
o si no tengo anticuerpos
pues me quieren por mi cuerpo
y también por mi fortuna

que no me mires con ese desdén

que no me mires con ese desdén

aunque tu estés hasta la coronilla

a mi la mascarilla

me sienta mu bien

Epitafio

Con lo lustroso que estabas
y te has quedado en los huesos,
que yo te daba hasta besos,
y me caían las babas.
Tú a mí, en cambio, me mirabas
como se mira a una suegra,
como quien poco se alegra
de que apetito despierte
¡¡¡Cuánto me apena tu muerte,
mi jamón de pata negra!!!!

Llamada abandonada

No he perdido la llamada,
sé que la puedo encontrar,
yaciendo en el celular,
esperando a ser hallada.
Pero esquivo saber nada,
ni motivo ni razón,
ni sentir la tentación
de escucharte al otro lado.
Ya sé que he abandonado
tu llamada de atención.

Décima feliz (curso "La décima y la canción"). Práctica número 2 (II)

Esta breve habitación
que guarda nuestros gemidos,
los sudores compartidos,
la desquiciada razón.
Este pequeño rincón,
este escenario indecente,
esta comida caliente
que nos mordemos quemada,
está tan deshabitada
como una cárcel ardiente

Décima feliz (curso "La décima y la canción") Práctica número 2

Bésame mirando al mar,
bésame en la tarde fría,
bésame por cortesía,
bésame de par en par.
Bésame en el paladar,
con un entusiasmo insano,
Bésame, tarde o temprano,
bésame, toda la vida,
porque si no, de esta herida
mis labios sangran en vano

Rocío

Que más quisieran las flores,
que tú alentaras la brisa,
las sales de tu sonrisa,
competir con sus olores.
Sumergir su mal de amores
en lo profundo del río.´
Sentir tu libre albedrío,
despertar, bajo tus mantas.
Qué más quisieran las plantas
que fueras tu su Rocío

Ansiedades

Me subo por la pared,
me lanzo por la ventana;
Síndrome de araña humana
balanceada en su red.
No es apetito,no es sed,
no son ansias ni ambiciones.
No tengo preocupaciones,
ni zozobra, ni ansiedad,
pero una sola verdad:
Necesito vacaciones

Décima Súper infeliz (curso "La décima y la canción). Práctica 1

Un árbol de hoja perenne
disfrazado en color ocre,
un humorista mediocre
de monólogo solemne.
Un autoinmolado indemne,
un navío en un desagüe,
un mortero que no fragüe
la base de una columna,
o el desaire de una alumna
que haga que mi amor se agüe.

El "amó"

Amor respirado y lento,
sentido hasta las entrañas,
amor aún con legañas,
amor con el último aliento.
Con orden de acercamiento,
con secretos escondites,
Amor que siempre repites
sin tener que pedir cita
con una lengua bendita,
dámelo y no me lo quites

El norte

Risas en ambos sentidos,
cafés a medio camino,
diálogos sin destino
y sin puntos ni seguidos.
Dos semidesconocidos
analizando los daños.
Escaleras sin peldaños
y un vagón abandonado
que no lleva a ningún lado
ni nos llevó hace dos años.

Bienvenidos al circo

Los pobres espectadores
realizamos malabares
con el sueldo y los pesares,
temiendo tiempos peores.
Somos necios domadores
de fieras de poder fáctico
que en el sentido más práctico
son payasos sin decencia
se ríen de la asistencia
y nos dan sin profiláctico.

Tiempo psiquiátrico

Nimbos abrasadores
sol que llueve sin parar
viento alterno bipolar
augurios desoladores
Tengo fríos y calores
el clima está trastornado,
qué lo llevo bien contado;
ya fue cuarenta de mayo
se pudo guardar el sayo
y yo sigo congelado

La selva laboral

Estrategias sibilinas
con pésimas intenciones,
inexplicables razones,
orejas por las esquinas.
Cotilleos sin espinas,
mala leche desnatada,
aquí nunca pasa nada
cuando ha sido culpa tuya.
Mas si es ajena, se aúlla
y se azuza a la manada.

Síndrome de Estocolmo

La cotidiana sorpresa
cuando te encuentran mis ojos.
Esos fingidos sonrojos
esa sonrisa traviesa.
El silencio que confiesa
nuestros secretos a voces,
dulces besares feroces,
párvula llave maestra
se hace la sueca y secuestra
cariño a base de roces

Por décimas

El minutero me acosa,
el cronómetro me estresa,
hoy no cumplo la promesa
que pesa como una losa.
Por esta empresa ambiciosa
que se me detenga el mundo
si hoy no me encuentro fecundo
para hacer la tontería
de la décima del día
por décimas de segundo

Condena

¿Por qué debo soportar
que usted me cuente su vida?
¿Por qué está tan resentida
con nada en particular?
¿Por qué tanto malestar
en todo lo cotidiano?
¿Por qué a los seres cercanos
nos ha caído esta pena?
¿Quién merece la condena
de un castigo sobrehumano?

El pan

Una miga de elegancia,
dos migajas de ternura,
tres mendrugos de locura,
la harina de tu sustancia.
El agua de tu fragancia,
La sal de tu pensamiento,
el calor de tu fermento
y amasarte con afán,
que estás más buena que el pan
y yo soy un niño hambriento

Fotografía

Con expresión intranquila
espera ansioso el ritual.
Al recibir la señal
engulle el saco de tila
Mi padre tira de la hila
y da un sorbo a la tisana.
El perro se le arrellana
tumbado en sus zapatillas,
como quien duerme a la orilla
de la condición humana

Lo inevitable

Con deseo compartido
y las miradas inquietas,
con sonrisas indiscretas
y un roce desprevenido.
Con el lecho, presentido,
más cerca de lo esperable,
y el sentimiento culpable
de no tener la mitad
mínima, de voluntad,
de evitar lo inevitable

El valor de la palabra

El valor de la palabra
con respecto al de la imagen
depende de lo que encajen,
de que el corazón se abra.
Es como un abracadabra
que un buen comienzo presagia
y que sin querer contagia
cuando unos ojos se miran
y en sincronía, respiran
pequeños trozos de magia

El Premio

Por un Príncipe de Asturias
no prostituyo a mi gremio.
Poner a cambio de un premio
las camas y las lujurias
no compensa las penurias
de los bravos compañeros.
Equiparad los dineros,
que eso sí que nos incordia,
no Premios de la Discordia
de monarcas putañeros.

Políticos

Qué patéticas criaturas,
lanzándose los difuntos,
buscando débiles puntos,
creando sombras oscuras.
Vertiéndonos sus basuras
sobre dolores ajenos.
Inoculando venenos
en las inocentes calles.
Emponzoñando los valles
de lágrimas, hechos cienos

A la luz de una vela

Donde una vela agoniza
y hay un beso en la penumbra,
la pupila se acostumbra
y la epidermis se eriza.
En la arena movediza
que engulle lo irrelevante
se ha abierto un interrogante
de cuerpos que se entrelazan,
de lenguas que se amordazan
tan solo por un instante

Regreso al futuro

El camino de regreso
no lleva a la misma plaza.
El tiempo, brutal, desguaza
cada etapa en su proceso.
Procuro salir ileso
y adaptarme al escenario.
No quiero ser secundario
sino redactar la historia,
definir mi trayectoria
sin guión ni calendario.