viernes, junio 19, 2020

El sentido de la vida (era hacia adelante)

Tengo la vida resuelta,
trabajar era el misterio,
nada más, lo digo en serio,
no había que dar más vueltas.
Siempre quedan tramas sueltas
dispersas por el camino,
como al girar del molino
no todo el río le mueve
ni todas las gotas llueven
al andar del peregrino.

Sin embargo, en ambos casos,
ves que firmes se mantienen
y que nunca se detienen
por lo que queda a sus pasos.
No viven de los fracasos
sino de cada ganancia.
Asumen la circunstancia
que no resulta propicia
y siguen sin avaricia
sin importar la distancia.