Taller de reparaciones
Caminó deprisa calle abajo, protegiendo entre sus brazos la bolsita de papel. El taller estaba en la esquina.
- Buenas - dijo.
- Buenas tardes, ¿que desea?- respondió el mecánico, rascándose la coronilla.
- Verá, le traigo esto, me lo han roto y quisiera repararlo - explicó, sacándo de la bolsa su corazón resquebrajado.
El técnico lo observó detenidamente, deteniéndose en cada una de las heridas.
- Esto no va a estar para hoy ¿eh? Ni para mañana. Esto tengo que pedir las piezas y... ufff ... Déjemelo, y ya le llamaré.
- Pues que fastidio.
1 Comments:
Hoooola, JuanilloNadiee! Yo visito tres o cuatro blogs asiduamente, pero no sabía que tú tenías el tuyo propio. Respecto a tu último Post... en cosas de bombas que manejan líquidos and so on, mejor ir al fontanero. La respuesta, por otra parte, será parecida, pero al menos la culpa la tendrá "el bajante". Siempre es bueno tener a alguien a quien echarle la culpa.
Bueno: tu Blog ya está en mi carpeta de Favoritos. Un placer. Y lo dicho: un día trinco la guitarra y te pego un susto.
Taluego!!
Publicar un comentario
<< Home