viernes, noviembre 18, 2022

Ligera (2ª parte)

Por eso, servidor desde ese día 

escojo solo amor de planta baja

que siempre pueda huir con garantía

y pueda escabullirme con ventaja.

Le pongo al picaporte una sonaja 

y aparco en suficiente cercanía 

que no me queda bien una mortaja

por un cariño en buena compañía. 

Aprendo judo, karate y taekwondo, 

por si él es campeón de medio fondo

y puede ajusticiarme en dos zancadas.

Dispongo de una alarma con un láser

y abajo del colchón, pistola Taser

en vías de evasión desesperadas