Los últimos días del Conde Drácula
Yo que nunca pude verme reflejado en un espejo,
yo que el alioli en mi vida lo había podido probar,
yo, que al beber sangre conseguía
por nunca jamás ponerme viejo
lo he perdido todo desde el día
en que te tire los tejos
Ahora peino canas y me crujen levemente los meniscos
y eso que mantengo esta abstinencia desde algo menos de un mes
porque te pones ciega ira
hecha totalmente un basilisco
si te pido que te hagas vampira
y poder darte un mordisco
Y beberte
y burlarnos de la muerte
que la sangre nos convierte
en leyendas inmortales
Es tan bello
que dos marcas en el cuello
nos conviertan en iguales.
Yo que procuraba no acercarme por una carpintería
porque las estacas en el pecho me caían bastante mal
Yo que andaba en ambientes nocturnos
y en las más oscuras compañías
Hoy, cuando hago la compra de turno,
normalmente voy al Día
Hoy que algo me falta y tal vez este pasando un bache
Hoy echo de menos las sangrías que me daban el poder
pero por amor he decidido,
serle siempre fiel a tu rH
y ahora las sangrías que me pido
sólo hacen que me emborrache
Y beberte
Y burlarnos de la muerte
que la sangre nos convierte
en leyendas inmortales
Es tan bello
que dos marcas en el cuello
nos conviertan en iguales
Yo que nunca pude mirar una cruz sin anestesia
yo que bronceado en la piscina, nunca me pude poner
me han tomado medidas del traje
para nuestra boda por la iglesia
y nos marcharemos de viaje
con rumbo a la Polinesia
Y aunque poco a poco cada vez tuviera menos energías
porque de tus venas te negabas a que pudiera beber
pude, de una vez calmar mi hambre
cuando a tener sexo te oponías,
porque estabas manchada de sangre
por estar en esos días
Y beberte
y burlarnos de la muerte
que la sangre nos convierte
en leyendas inmortales
Es tan bello
que dos marcas en el cuello
nos conviertan en iguales
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home