viernes, octubre 18, 2019

Epílogo

Aún no sé cuando me volví invisible
ni cuando descumplimos las promesas
Ya nunca nos miramos por sorpresa
Ya no podemos hacer lo posible

Hoy que permanecemos impasibles
e intentamos turnarnos en la mesa
Hoy la costumbre no ha salido ilesa
Hoy el reloj se despertó inflexible

No hay terremotos en nuestro epicentro
Todas las gotas colmaron el vaso
Pienso aquí a solas, para mis adentros
La casualidad mezcló nuestros pasos
En aquel insperado reencuentro
y ha resultado un rotundo fracaso